domingo, 14 de diciembre de 2008

jueves, 11 de diciembre de 2008

Los saberes de mis estudiantes


En la actualidad quien no sabe usar Internet y no tiene una cuenta de Messenger esta “out” esta fuera moda, eso dicen los jóvenes en mi plantel. El uso del Internet es de un 80% de la población estudiantil, aunque el uso provechoso sea apenas del 5%.Nuestros alumnos usan el Internet, para una gran infinidad de cosas como: bajar música con los programas Ares y Limeweare, subir sus propios videos y verlos en Youtube, chatean en el Messenger, entran a jugar cartas, damas, etc., ven su horóscopo, usar la calculadora. Mandan y reciben mensajes principalmente con Hot mail, Yahoo y G-mail.
También utilizan las redes sociales como facebook, hi5, metroflog, principalmente. Cuando realizan sus tareas ya sean investigaciones o imágenes se meten principalmente al buscador google, el cual se ha considerado como un sinónimo de buscador, ya que la mayoría desconoce buscadores alternativos.
Mi estrategia es que ellos utilicen el Internet de manera más efectiva, que no lo vean solo como moda sino como una herramienta de aprendizaje, sacando realmente la información que se solicita, en este semestre que está por terminar, solicite que realizaran la investigación de un tema determinado de manera individual con sitios y direcciones proporcionadas, y ya en clase integrados en equipo hicieron un análisis de los temas encontrado y en forma coolaborativa propusieron una técnica didáctica para su aprendizaje un equipo utilizo pantomima, otro hizo un esketch, otro hizo una canción, etc.,en total fueron 7 equipos cada uno con una técnica diferente pero todos con el mismo tema.
Pero con respecto a el uso del Internet, la verdad, es que en eso los alumnos aprenden en forma rápida, en cambio nosotros no, algunos, por temor, tiempo, apatía o ignorancia utilizamos un sin fin de pretextos para postergar el uso de las nuevas tecnologías, pero lo bueno de todo esto de la Reforma Educativa es que por obligación, compromiso y sobre todo responsabilidad hemos aceptado el reto, y aquí estamos cometiendo errores y aciertos, la mayoría un poco o muy emocionados con nuestro blog. .

miércoles, 10 de diciembre de 2008

La aventura de ser maestro.



Como bien se a dicho, la enseñanza es ambivalente. Podemos disfrutar lo que hacemos, y valorarlo o lamentarnos amargamente porque no tenemos definidas nuestras metas.
Cuando nos sentimos frustrados porque la suerte nos llevo a ser docentes, cuando el temor nos invade, por la clase que no sabemos como explicar, y aparte tenemos que soportar a el grupo más odioso, y tenemos que fingir alegría y tranquilidad, pero la verdad es que queramos salir corriendo porque pensamos que no vamos a poder, pero tenemos que hacerlo. Que tristeza, es como vivir una forma de esclavitud, sentir las cadenas, que aunque no las ves, son tan fuertes y difícil de romper.
En cambio, es algo maravilloso, sentirse respetada y admirada por los alumnos, ser auténticos sin temor a equivocarse, sentirse libre tratando cada día de hacer algo diferente con los alumnos.
Pero la verdad es que prefiero hacer un alto, tengo que reconocer que teniendo 20 años de experiencia docente se muy poco lo que significa ser maestro, siempre mi mayor preocupación fue solo dominar los temas del programa, tener control de grupo, motivarlos un poco, y ya en el salón de clases, con mis habilidades de liderazgo y una voz fuerte todo estaba resuelto, además siempre he considerado que para ser maestro lo importante es tener el Don, llevarlo en la sangre, y sin parecer un poco suntuosa yo creo que lo tengo y es algo innato en mi, lo supe el primer día que estuve en el aula de clases. Que mas quería, eso era suficiente para alcanzar el éxito, todo lo demás como la planeación, organización y sobre todo la pasión de ser maestra salían sobrando, justificaciones, puede haber muchas.
Por eso, ahora que estoy aquí veo esta especialización como un gran desafió, no es que me considere una pésima maestra, porque en mis luchas diarias siempre he tratado de cumplir, de ser responsable y dar el mayor de mis esfuerzos pero creo que puedo dar más.
La lectura de La aventura de ser maestro, es muy interesante, realmente me motivo, pensar sentir y hacer es un gran reto. Pensar, entiendo como planear diseñar estrategias, sentir, es no solo apasionarme yo sino lograr la pasión por aprender en cada alumno y el hacer ejecutar todos nuestros proyectos alcanzar todas las metas establecidas. Y mi orgullo de ser profesor?
Que gran desafío, lograr que tus alumnos te recuerden así, con orgullo con admiración, con la satisfacción de que la Maestra Georgina Cano fue su maestra.
El orgullos de ser maestro como dice el Profesor Esteve, ni el poder ni el dinero lo da, mis metas cumplidas, la pasión por ser Maestra y ver triunfar en la vida a un alumno nos brinda esa oportunidad de sentirnos orgullosos cada día

Gina Cano

Mi confrontación con la docencia.

Bueno, lo primero que quiero aclarar es que no creo en las casualidades y los asares de la vida, mas bien creo que cada individuo participa en la definición y conquista de sus propósitos y sueños en la vida, a cada uno se nos presenta la oportunidad de elegir en forma acertada o equivocada, en el tiempo indicado, a veces un poco tarde, el propósito por el que llegamos a este mundo, y bueno, yo creo con certeza que mi oportunidad de elegir lo que iba a ser con mi vida se presento cuando ingrese a la SEP, aunque antes de comprender ese propósito haya tenido que recorrer otros caminos y alternativas que se me presentaron. Fue así que ingrese a la carrera de Contador Público y me titule en el año 1990, dos años después de terminar la carrera.
Cursaba precisamente el octavo semestre de la carrera cuando me vi en la necesidad de trabajar para poder terminar mis estudios, ya que los recursos económicos que recibía de mis padres eran insuficientes. Fue entonces que se me brindo la oportunidad de ingresar al Sistema SEP en el mes de sep de 1987, me inicie como administrativa, y dos años después obtuve una plaza de docente, también por esas fechas me invitaron para que ocupara el puesto de Contralor en la misma institución. El obtener una plaza como docente no fue tan motivarte como la oportunidad de practicar mi carrera, para eso me había preparado, sin embargo tenía que dar clases, ya era docente y tenia que cuidar mis horas.
Me inicie como docente impartiendo la materia de Contabilidad, técnicamente dominaba la materia, pero carecía de los conocimientos pedagógicos indispensables para instruir a un grupo. Mi experiencia como alumna y mi amor por la Contabilidad me ayudaron para que saliera adelante los primeros años.
Ahora que tengo 20 años como profesora, tengo que reconocer, que fueron luchas constantes y obstáculos que he atravesado para llegar a enamorarme y comprometerme con la docencia.
Pienso que ser docente requiere carácter, compromiso y responsabilidad, porque al estar impartiendo nuestra clase impartimos mas que conocimientos, transmitimos modelos de vida, frustraciones, satisfacciones, triunfos y valores. Es como un doctor ellos cuidan de nuestro cuerpo, en sus manos esta el que vivamos o muramos, así nosotros también como docentes somos responsables de entregar a nuestro país jóvenes capaces de integrarse a la sociedad en forma productiva, con las habilidades necesarias para generar cambios positivos en el entorno donde se desarrollen.
Creo que es importante que cada uno de nosotros reconozca que estamos viviendo tiempos de cambio y si no estamos dispuestos a enfrentarlos estaremos destinados a volvernos obsoletos
Y es precisamente este ritmo de vida acelerado en que estamos viviendo que provoca que los jóvenes quieran volar con sus propias alas, empiezan una nueva etapa en su vida, ya no se sienten niños ni adolescentes ellos consideran que muy pronto serán adultos. Para mí, trabajar con jóvenes del nivel medio superior representa mayor preparación y mayor compromiso porque ellos no se conforman con la enseñanza tradicional, ellos se consideran capaces de emitir juicios, defender su postura y apasionarse por lo que les intensa.
Considero que en esto puedo sentirme satisfecha, lograr que cada joven distraído y lleno de rebeldías se interese en mi clase, que cuestione, y que busque hacer cambios en su vida. Al mismo tiempo en ocasiones me siento impotente y con las manos atadas, cuando con mis limitadas herramientas quiero ayudar a alguien y no obtengo los resultados que deseo.
Georgina Cano